La historia detrás del drama de la señora Estelvina Yáñez de Corte Alto [Reportaje]

La información es de Corresponsales
La redacción y fotografías son del Ing. Gustavo Barría.

Estelvina del Carmen Yáñez Uribe tiene 85 años y vive en calle Pedro Aguirre Cerda número 343 en la localidad de Corte Alto, comuna de Purranque. La mujer de avanzada edad vive sola en una antigua casa de madera y su historia se hizo conocida a nivel nacional en el año 2011, luego que se supiera que vivía en condiciones de extrema pobreza junto a una gran cantidad de mascotas.

La señora Estelvina nos recibe en su casa sonriente y nos cuenta parte de su historia, en su niñez vivió junto a su madre y hermanos en la localidad de Cuatros Vientos en Purranque, para posteriormente dedicarse a vender ropa nueva en predios agrícolas de la zona, emprendimiento que llevó a cabo en conjunto con la familia Julián durante unos años, dinero recaudado que utilizó para ayudar a su mamá a comprar media hectárea de terreno en la localidad de Corte Alto, lugar donde ha vivido casi toda su vida, al principio junto a ella, fallecida hace 30 años y posteriormente con un hermano, fallecido el año 2017.

Estelvina Yáñez y Felipe Navarro, 30 de Abril de 2020.

La octogenaria mujer nos relata que en su juventud vivió buenos momentos económicos y que junto a su madre mantenían una cocinería en su casa llamada "Donde la Rosa", lugar donde atendían personas de diferentes puntos de la comuna, principalmente de la comunidad siria, quienes disfrutaban de las cazuelas que allí preparaban; luego con el paso del tiempo, a principio de los años 90 quedó sola y tuvo que cuidar de su hermano quien padecía de varias enfermedades, jubilando diez años después con una pensión de alrededor de 100 mil pesos; monto de dinero con el que ha tenido que subsistir mes a mes los últimos 25 años.

Pedro Aguirre Cerda N°343, Corte Alto, 30 de Abril de 2020.

Cuando se le comenta sobre la gran cantidad de perros que mantiene en su propiedad, se ríe y nos cuenta que no fue algo planificado; sino más bien una reacción al abandono de las mascotas frente a su casa; la señora Estelvina nos cuenta que todo comenzó hace años cuando decidió alimentar y  recoger perros que la gente abandonaba cerca de su domicilio durante las noches y que pronto se hizo correr la voz en Corte Alto que había una mujer que cuidaba de los canes, motivo por lo que gran cantidad de personas dejaron mascotas afuera de su domicilio, decidiendo ella cuidar de todos los animales en su propiedad; lo que complicó rápidamente las cosas. El alimento para los perros empezó a escasear con rapidez, llegaron gran cantidad de ratones; los perros empezaron a quedarse en el patio, bodegas y luego en el interior de la casa, deteriorándola rápidamente. Los perros seguían llegando en grandes cantidades hasta que vecinos y personal policial del sector debió empezar a controlar la situación con multas y advertencias de detención a quien le entregue animales a la dueña de la propiedad, empezando a mermar lentamente la llegada de más animales a la casa de la señora Estelvina quien entre risas comenta que no era amante de las mascotas pero sentía pena y responsabilidad por ellas cuando las abandonaban y como tiene harto terreno decidió hacer algo por los animales, sin embargo comenta que ya está cansada y no desea recibir más perritos aunque quiere quedarse con los que tiene actualmente, alrededor de 20 mascotas quienes deambulan con total libertad por el patio e interior de la vivienda.

Mascotas de la señora Estelvina, 30 de Abril de 2020.

Con cierta amargura nos cuenta que hace tres años llegaron unas personas de Puerto Montt y le ofrecieron ayuda para limpiar la propiedad y mantener a sus mascotas, sin embargo los voluntarios ingresaron a la casa, limpiaron y sacaron casi todos los muebles a la calle donde procedieron a quemarlos ya que estarían contaminados y en mal estado; sin embargo luego no regresaron a reemplazarlos, logrando la dueña de casa rescatar una mesa y dos sillas, siendo la totalidad de enseres que mantiene ahora en su domicilio. La afectada nos cuenta que todos sus muebles eran de lingue y laurel y si bien estaban sucios, no estaban podridos.

Dormitorio de la vivienda. 30 de Abril de 2020.

Estelvina nos cuenta que no tuvo hijos y que su familia, hermanos y sobrinos viven en San Carlos de Bariloche, Argentina y que no la visitan hace muchos años ya que ahora no posee recursos para poder atenderlos; también asume que las condiciones sanitarias en las que vive no son las mejores y siempre aparece alguien para ayudarla pero luego de unos meses se van y debe nuevamente ingeniárselas para conseguir leña y hacer cosas básicas como lavar su loza ya que no tiene agua en la cocina y transporta el vital elemento con una botella de plástico la que llena con una llave en el patio. Lo mismo con sus necesidades, hace años que no posee un baño y nos cuenta que personal municipal le llevó un juego completo de WC, estanque y un lavamanos hace 3 años, sin embargo nunca regresaron a instalarlo, motivo por lo que se mantuvo hasta este mes de Mayo de 2020 sin baño en el interior de su vivienda.

Lavaplatos sin agua potable. 30 de Abril de 2020.

Hace algunos días, la Sociedad Protectora de Animales de Osorno en conjunto con los voluntarios de Purranque Felipe Navarro, y las hermanas Natalia y Valentina Trujillo; realizaron una campaña de ayuda, logrando recaudar dinero en efectivo y aportaron además a la señora Estelvina con un refrigerador, leña seca, y la instalación del nuevo baño; debiendo realizar también nuevas conexiones de agua, alcantarillado y enchufes para poder utilizar los artefactos eléctricos ya que la casa cuenta solo con una ampolleta y un interruptor. De la misma manera, los voluntarios purranquinos realizaron reparaciones en el ducto evacuador de gases de la estufa a leña para prevenir un incendio y entregaron gran cantidad de alimento para las mascotas.

Natalia Trujillo, Felipe Navarro y Estelvina Yáñez. 30 de Abril de 2020.

Con cierta picardía, la señora Estelvina relata que no le gusta que "la hagan lesa" y acusa que personal municipal le fue a dejar una canasta de abarrotes pobre y que no tenía ni zanahorias; y que debido a la mínima cantidad de alimentos recibido decidió investigar y fue a conversar con sus vecinos en Corte Alto, descubriendo que le habían entregado una canasta de alimentos para escolares, son las mismas cosas que le entregan a los niños de la escuela comenta entre risas, aunque reconoce que no todo es tan malo y agradece a las jóvenes profesionales del Cesfam que la cuidan y la trasladan cada cierto tiempo para hacerle controles ya que nos cuenta que ha sufrido varios accidentes en su vida, desde la caída desde un árbol hasta el corte de una rodilla con un brasero de lata ya que hubo un tiempo que no tuvo estufa; pero que ya está recuperada.

Leña seca donada por la familia Navarro y Trujillo. 30 de Abril de 2020.

Mientras el gásfiter, contratado por voluntarios, instala la nueva sala de baño, la señor Estelvina nos cuenta que no le gusta andar pidiendo ayuda a la municipalidad ya que las asistentes sociales la van a visitar y después de un tiempo aparecen con algunas cosas, como por ejemplo con el lavaplatos, el que dejaron hace años en la cocina de la casa pero sin agua, por lo que prefiere recibir ayuda de sus vecinos o personas que vienen de otras ciudades. Incluso me trajeron un urinario, comenta riéndose por el artefacto para público masculino que no le presta ninguna utilidad.

Sala de baño con urinario usados extraídos desde la vivienda. 30 de Abril de 2020.

Por ahora, los voluntarios purranquinos están gestionando ayuda para desmalezar y desratizar la propiedad, así como también le ofrecieron la reparación de cierres perimetrales y construcción de un pequeño canil en el patio de la casa para poder mantener sus mascotas a buen resguardo y evitar que estén en el interior de la vivienda; evitando así el mal olor y las plagas.

La señora Estelvina se despide con una gran sonrisa comentando que a su edad ya no está interesada en nada material y que solo desea ayuda para poder mantenerse bien y así poder tener a sus perritos que la acompañan.

Gásfiter instalando nueva sala de baño en la vivienda. 30 de Abril de 2020.

Interesados en realizar algún aporte pueden contactarse al teléfono +56999139783, tratar con Felipe Navarro